domingo, 9 de octubre de 2011

DEMOCRACIA Y BANCO CENTRAL EUROPEO



Como ya conocen, este blog les ha facilitado la carta que el presidente del Banco Central Europeo, Monsieur Trichet, envía al Sr. Berlusconi, primer ministro italiano. La firma no está sola, sino que va acompañada por la del que será su sucesor, il signore Mario Draghi. Es una sutil advertencia para que el primer ministro no piense que esperando la substitución de Trichet, que está en las ultimas de su mandato, las cosas pueden variar.


A las ordenes del director de la publicación paparandesa les facilito mis comentarios sobre la carta, a la vez que me he permitido, a través del GOOGLE Translation y para evitar errores de interpretación, poner la versión castellana de la misma.


Parece ser que el presidente de nuestro estado federal recibió una misiva equivalente(aunque esta, si existe, no ha llegado a la prensa), lo que aumenta el interés de su lectura, sobre todo a la luz de los últimos acontecimientos constitucionales.


En la traducción me he permitido subrayar lo que me parece más significativo en aras a hacer entender urbe et orbi que los recortes en los servicios públicos, las afectaciones a los derechos laborales y el cambio vertiginoso de la constitución no es mera interpretación gubernamental, sino el cumplimiento casi estricto de las ordenes recibidas.


En otro tiempo, afortunadamente pasado, creo, una carta de este estilo y con esas imperativas exigencias hubiera sido motivo más que suficiente para que las legiones, los tercios, Nelson o el séptimo de caballería aparecieran en escena para recordar donde recae y quien tiene la soberanía. Hoy no es así, ya he dicho que afortunadamente, y como la UE está basada en la paz y la tranquilidad las reacciones a tal escrito no se han traducido en golpes de mano militares o cosa parecida.


Probablemente, la intención del actual presidente del BCE y de su seguro substituto (por cierto antiguo empleado y revisor de la entidad que quita o da calificaciones financieras y que ocultó la situación griega todo lo que pudo, mientras hacía caja) es buena, su objetivo tal vez sea colaborar para que la república italiana o en su caso el Reino de España eviten las peores situaciones financieras que las amenazan.


Ahora bien, tan poderosos señores, los del BCE, con esa buena intención apremian de una forma poco ortodoxa a quien está donde está por causa de las urnas. Una situación muy distinta a la suya propia, que es por cooptación o nombramiento simple. Las cosas son por lo tanto muy distintas vistas desde el sistema democrático que desde el corporativo. Este atiende a unos pocos clientes y aquel a la totalidad de los ciudadanos. Los tiempos, las exigencias de acuerdos, de equilibrios entre intereses y un más que largo etcétera diferencian ambas posiciones. No es lo mismo, desgraciadamente, subir o bajar el tipo de interés del BCE que proceder a laminar los derechos de jubilación de los trabajadores.


Los subrayados me permiten evitar un comentario en extenso, simplemente leyéndolos uno adivina por donde cae la ideología, los intereses y las posiciones sociales y políticas de los firmantes. No es que sea tan inocente como para no entender que en el mundo de la economía las grandes empresas, las entidades financieras y tutti cuanti son los que cortan el bacalao. Pero, también, dentro del realismo más crudo uno esperaría de autoridades con tanto poder y tan poco accesibles a la rectificación, cierto pudor y una pequeña carga de ecuanimidad entre los intereses de mercaderes, trabajadores, pensionistas, bancarios y el resto de estamentos de esta nueva edad media en la que estamos.


Todo y que en el enunciado se apunta ligeramente a medidas amplias, en la parte de la concreción solo aparecen los recortes de bienes y derechos que ya sabemos. Nada se dice al respecto de la fiscalidad como instrumento de equilibrio (y de justicia), nada se pone como elemento de reprimenda para los bancarios y especuladores que nos han llevado a donde estamos y otras menudencias que me abstengo de detallar para no ponerles de más mala gaita.


Como economista, como ciudadano, como madurito realista se que hay que tomar medidas muy duras y que afectaran sin ninguna duda a nuestra capacidad económica, a la hipotética riqueza o al bienestar, llámenlo como quieran. Pero también como economista, como ciudadano y como madurito realista pienso que los costes son a repartir en proporción a lo que cada uno tiene y a lo que cada uno ha hecho. Y que el reparto debe hacerse a la vista del público y con su beneplácito.


Otra cosa es simplemente el robo del siglo, la tomadura del pelo o la destrucción de un modelo social basado en equilibrios y acuerdos.



Lluis Casas Molto emprenyatto




La carta del BCE al Gobierno italiano


El texto, publicado (y traducido al Inglés) del "Corriere della Sera", enviado a Italia a principios de agosto con las medidas que deben tomarse como condición (aunque no declarada oficialmente) por el apoyo de las intervenciones del banco central

Mario Draghi, Jean-Claude Trichet Frankfurt / Roma, 05 de agosto 2011
Señor Primer Ministro,


El Consejo de Banco Central Europeo el 4 de agosto se ha discutido la situación en los mercados de bonos del gobierno italiano. El Consejo de Gobierno considera que


la acción urgente es requerida por las autoridades italianas para restaurar la confianza de los inversores.


La Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la zona del euro-21 de julio 2011 llegó a la conclusión de que "todos los países del euro

reafirman solemnemente su determinación inflexible para cumplir plenamente sus soberanos individuales y la firma de todos sus compromisos con las condiciones sostenible reformas fiscales y estructurales." El Consejo considera que Italia tiene que fortalecer con urgencia la reputación de la soberana y

su firma en su compromiso con la sostenibilidad fiscal y reformas estructurales.

El Gobierno italiano ha decidido aspirar a un presupuesto equilibrado en 2014, y para ello, ha introducido recientemente un paquete de medidas.

Son pasos importantes, pero no suficientes.
En la situación actual, consideramos que las medidas esenciales: 1. Vemos la necesidad de medidas importantes para

aumentar el potencial de crecimiento.

Algunas decisiones recientes tomadas por el gobierno se mueven en esa dirección, así otras medidas que se están discutiendo con los interlocutores sociales. Sin embargo, se necesita más y es paso crucial en este sentido con la decisión. Los principales desafíos incluyen

la creciente competencia, especialmente en los servicios, mejorar la calidad de los servicios públicos y el rediseño de los sistemas impositivos y regulatorios que son más adecuados para apoyar la competitividad empresarial y la eficiencia del mercado de trabajo.


a) Se necesita una estrategia integral, la reforma radical y creíble, como la

plena liberalización de los servicios públicos locales y los servicios profesionales. Esto debería aplicarse en particular a la prestación de servicios locales a través de privatización a gran escala.

b) Existe también la necesidad de proseguir la

reforma del sistema de negociación colectiva sobre salarios, lo que permite acuerdos a nivel de empresa con el fin de reducir los salarios y las condiciones de trabajo a las necesidades específicas de las empresas

y hacer que estos acuerdos más relevantes que otros niveles de negociación. El 28 de junio un acuerdo entre los principales sindicatos y asociaciones de la industria se están moviendo en esta dirección.
c) se debe tomar un

examen cuidadoso de las normas que rigen la contratación y despido de empleados, el establecimiento de un sistema de seguro de desempleo y un conjunto de políticas activas para el mercado de trabajo que son capaces de facilitar la reasignación de recursos para empresas y hacia sectores más competitivos.
2. El gobierno necesita tomar medidas inmediatas y decisivas para

asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas.
a) Otras medidas son la corrección necesaria del presupuesto. Consideramos que es esencial para las autoridades italianas para

anticipar al menos un año calendario de entrada en vigor de las medidas adoptadas en el paquete de julio de 2011.

El objetivo debe ser un déficit mayor de lo esperado hasta ahora en el 2011, un requerimiento neto de 1% en 2012 y un presupuesto equilibrado en 2013,

principalmente a través de recortes de gastos. Usted puede tomar medidas adicionales

en el sistema de pensiones, el endurecimiento de los criterios de elegibilidad para la jubilación y traer de vuelta la edad de jubilación de las mujeres en el sector privado rápidamente en línea con lo establecido para el sector público, con un importante ahorro en el año 2012. Además, el gobierno debería considerar una reducción significativa de los costes del empleo público, el fortalecimiento de las normas de facturación (la nota de sustitución) y, si es necesario, mediante la reducción de los salarios.


b) Debe ser una cláusula de reducción automática del déficit, que especifica que cualquier desviación del déficit se compensa de forma automática con cortes horizontales en los gastos discrecionales. c) debe ser sometido a un estricto control de la asunción de la deuda, incluido el comercial, y los costos de las autoridades regionales y locales, de conformidad con los principios de la reforma en curso de las relaciones fiscales entre niveles de gobierno. Dada la gravedad de la situación en los mercados financieros, consideramos crucial que todas las acciones mencionadas en los apartados 1 y 2 se toman lo más pronto posible el decreto, seguida de la ratificación parlamentaria a finales de septiembre de 2011. Sería apropiado también una reforma constitucional que hace que las reglas presupuestarias más estrictas.
3. También alentamos al gobierno a tomar medidas inmediatas para garantizar una revisión de la administración pública con el fin de mejorar la eficiencia administrativa y la capacidad para satisfacer las necesidades de las empresas. Los organismos públicos deben convertirse en el uso sistemático de indicadores de desempeño (especialmente en la salud, la justicia y la educación). Hay una necesidad de un fuerte compromiso para abolir o fusionar algunos niveles administrativos intermedios (tales como las provincias). Las acciones deben ser fortalecidas para aprovechar las economías de escala en los servicios públicos locales.

Confiamos en que el Gobierno tomará las medidas adecuadas.



Mario Draghi, Jean-Claude Trichet