viernes, 23 de mayo de 2008

DICTAMEN SOBRE LOS DINEROS DE LAS AUTONOMIAS (3)


Seguiré con la tabarra de la financiación autonómica, aunque les prometo que este comentario será el último, de momento. Daremos tiempo a la negociación, si es que el mecanismo con que ha de definirse la financiación pública de Catalunya y por ende del resto de CCAA merece tal nombre.


El comentario de hoy, reservado desde el principio al espacio de los números, será un repaso a los dineros actuales que disponen las CCAA para proporcionar a sus ciudadanos los servicios que necesitan. Les advertiré de entrada que verán ustedes cosas sorprendentes. Si alguna vez se han creído ustedes el discurso de la España única, las cifras de gasto (y financiación) de los servicios básicos de bienestar social les harán cambiar de opinión. Esto no solo es un estado federal, sino la anarquía más pura o como se dice en Parapanda: una zahúrda. Cada uno tiene lo que le da la gana al... al gobierno español. Pueden ustedes cambiar lo que le da la gana por circunstancias: queda más elegante, y gobierno por gobiernos para repartir la carga.


Empecemos con algo perfectamente compresible:


Recursos por ciudadano que disponen las CCAA en materia de salud, educación y servicios sociales:


Salud, educación y servicios sociales en el 2006 euros por persona %. [Perdonen la chapuza del siguiente cuadro. El informático no acudió a la redacción por embriaguez]



ANDALUCIA

1.901,

97,1

ARAGÓN

2.038.

104,1

ASTURIAS

2.008,

102,6

CANARIAS

2.132,

108,9

CANTABRIA

2.158,

110,3

CASTILLA LA MANCHA

2.137,

109,2

CASTILLA LEON

2.055,

105,0

CATALUNYA

1923.

98,3

COMUNITAT VALENCIANA

1.715,

87,6

EXTREMADURA

2.195,

112,1

GALICIA

1.981,

101,2

ILLES BALEARS

1.720,

87,8

LA RIOJA

2.298,

117,4

MADRID

1.900

97,1

MURCIA

1.858,

94,8

PAIS VASCO

2.295,

117,3

NAVARRA

2.323

118,6





Las diferencias son enormes, un 35% entre Navarra y El Pais Valencià, no es una cifra baladí. No creo que haya nada en el mundo que explique la racionalidad de esa diferencia. Ni de las otras que se observan. Alguien podria aludir a un sistema de solidaridad en el gasto. No estoy de acuerdo, pues estamos tratando con el coste de un tratamiento de cáncer a una persona sea quien sea, o de la educación de Manolito, 8 años, independientemente de quien sea hijo o donde tenga la escuela. En el fondo esas cifras nos dicen que el mismo Manolito que en Navarra, La Rioja o Cantabria tiene una escuela razonablemente bien dotada si se va Andalucía o Catalunya lo tiene más chungo.


El efecto de la información anterior es inmediato: ¿como es posible establecer en la constitución que todos somos iguales ante el estado, cuando las cifras de presupuesto demuestran que no es así? ¿Qué diferencia hay entre un ciudadano en Catalunya y otro en Andalucía o en Cantabria para que existan las diferencias mayúsculas en recursos? ¿Cómo es posible que La Rioja o Cantabria estén en las cercanías del concierto vasco?


La respuesta oficial es que las diferencias se deben a índices demográficos o geográficos que corrigen las necesidades básicas de los ciudadanos. Bien, en todo caso estos correctores podrían explicar parcialmente la diferencia, pero, sin ninguna duda, la magnitud real se debe a la irracionalidad del cálculo de necesidades, por decirlo de algún modo. Hay un indicador irrefutable de la incoherencia, Andalucía está por debajo de Extremadura un 16% y por debajo de la media estatal. ¿Quién me lo explica?.


Veamos ahora que nos dicen los números con respecto a las aportaciones de los ciudadanos, según su distrito postal:


POBLACIÓ

Capacitat fiscal per càpita

ANDALUCIA

7.975.672,0

3.252,1

ARAGÓN

1.277.471,0

4.527,2

ASTURIAS

1.076.896,0

3.881,7

CANARIAS

1.995.833,0

1.575,7

CANTABRIA

568.091,0

4.252,8

CASTILLA LA MANCHA

1.932.261,0

3.367,1

CASTILLA LEON

2.523.020,0

3.726,4

CATALUNYA

7.134.697,0

4.951,0

COMUNITAT VALENCIANA

4.806.908,0

3.946,5

EXTREMADURA

1.086.373,0

2.664,4

GALICIA

2.767.524,0

3.333,3

ILLES BALEARS

1.001.062,0

5.804,6

LA RIOJA

306.377,0

4.190,1

MADRID

6.008.183,0

5.654,9

MURCIA

1.370.306,0

3.514,8




total regimen común

41.830.674,0

4.056,1

imports total millares euros


169.670.141,8


Aquí corresponde decir que los milagros no existen y que el cuadro anterior obtiene su clarificación en este: Los ingresos fiscales dependen del nivel de renta de los contribuyentes (en realidad solo de los que cumplen adecuadamente con las normas fiscales, distinción esta siempre oportuna), de ello se deduce que los que declaran más generan más recursos para las administraciones. Nada que decir al respecto. La sorpresa viene cuando esos flujos se transforman de ingresos individuales (la aportación fiscal de cada uno) en recursos para el gasto. Me explico, mientras el sistema de ingresos es individualizado, sin componente territorial o colectiva que no sea el volumen de las rentas o los negocios, el sistema actúa correctamente respecto al criterio social de quien tiene más paga más. El salto se produce cuando nos situamos en el mundo de los servicios públicos. Estos están gestionados principalmente por las CCAA y estas tienen una financiación global (no individual). Los recursos que obtienen terminan siendo extraordinariamente desiguales, hasta el punto de romper la idea que las necesidades frente a la salud, la educación y los servicios sociales son a nivel individual muy parecidas. El asunto termina en que las comunidades en donde hay mayor recaudación fiscal, tienen menores recursos económicos para atender las mismas necesidades personales.


En síntesis es lo que se está debatiendo ahora: las personas estén donde estén tienen el derecho a niveles parecidos de prestaciones sociales, independientemente de donde vivan.


Para remachar el asunto les pondré un ejemplo: ¿Qué pensarían si en el momento de la jubilación les dijeran que su pensión es el 15% menor por que viven en Catalunya que la que obtendrían en Cantabria? Eso pasa cada día en el mundo de la sanidad, la educación u los servicios sociales.


Sería bueno que alguien dejara aparcada la demagogia y sentáramos las bases de un sistema de financiación para los servicios públicos básicos coherente y justo.


Lluis Casas, matemático (Parapanda School of Economics)